Yo tuve la suerte de hacerles unas fotitos para la revista Vanidad en una acalorada tarde de verano, abanico y coca cola en mano. Mirándolas solo tengo ganas de que sea verano para ir a todos los festivales posibles, no soy muy amiga del calor, pero me encanta enlazar conciertos hasta el amanecer.
La historia con Kasabian, mejor os la cuento otro día.